- 8 de septiembre de 2008
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- Educación medica
Cómo empezar a prepararse para el verano, ahora ¡ya!
A tomar medidas
Como buenos chilenos, dejamos siempre todo para última hora, y prepararse para llegar con unos cuantos kilos para el verano también está dentro de esta realidad. Sí, porque aunque no lo queramos reconocer, somos campeones para comenzar a preocuparnos de nuestra silueta recién en los últimos meses del año, y empiezan las inscripciones en los gimnasios, las dietas extremas, pero, sin embargo, por la premura del tiempo, no siempre conseguimos nuestro objetivo. La profesora de Educación Física, Paula Puga, explica que lo ideal es tomar medidas anticipadas, y más que eso, tener una rutina de vida tanto en materia de actividad física como de alimentación, con el fin de que la llegada del verano no nos sorprenda desprevenidas, y menos descuidadas.“Lo ideal es realizar en forma regular ejercicio físico, ya sea en un gimnasio como al aire libre.Es importante equilibrar la alimentación saludable, con las horas necesarias de trabajo, y una actividad deportiva.
El ejercicio debe ser aeróbico, complementado con ejercicios localizados, que ayuden a mantener en equilibrio la postura y la musculatura”, recomienda. Comenzar ahora ¡ya! Pero como la realidad de muchas mujeres y hombres es otra, y no es precisamente la de hacer deporte y comer sano en forma regular, la instructora entrega una serie de consejos para comenzar a ponernos en forma ahora ¡ya!, y no esperar recién los meses de septiembre y octubre para ponernos “las pilas”. “Para las que no han realizado ejercicio durante el año, deben empezar ahora durante el mes de agosto a cuidar su alimentación. Deben seguir una dieta equilibrada, rica alta en verduras y bajo en aceites, lípidos, frituras, y grasa. Y junto a ello, realizar un programa de ejercicios supervisado por profesores de educación física”, aconseja. La deportista agrega que lo mejor para comenzar a bajar de peso desde ahora es comer en forma equilibrada, y por un tiempo disminuir al máximo los hidratos de carbono, es decir, las masas. Lo ideal es reemplazarlas por verduras verdes como acompañantes de la proteína, ya sea carne, pollo y pescado.
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